NUEVO: A la vuelta de la rueda // Christian Compagnon
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A finales del año 2018 fue el lanzamiento del libro del poeta chileno Christian Compagnon editado por Juan Pablo Fante, del cual fuimos parte por medio de nuestros servicios de diseño y diagramación.
‘A la vuelta de la rueda’ lo puedes adquirir en nuestra tienda online.
Queremos compartir el texto que Sebastián Arancibia, editor de Naranja Publicaciones, realizó para la presentación del libro en Santiago.
Conocimos a Christian durante el otoño pasado.
Aquella vez, aunque no recordamos si fue durante el primer o el segundo encuentro, con cierto recelo, pronto con gran confianza, nos mostró una libreta de color rojo con sus poemas. No eran solo poemas, habían listas, cuentas en algunas páginas. Un montón de anotaciones, poéticas y cotidianas, que mostraban con elocuencia las virtudes de la intimidad de una libreta.
Cuando vimos junto al otro Sebastián la libreta original y los textos en formato word editados, notamos que los textos clamaban por regresar a ese formato, o manteniendo esa corporalidad de la libreta, su tamaño, su capacidad de contener textos (de cualquier tipo) que tienen distintos ritmos que, al igual que una borra de café o una tirada de tarot, expresa en los recovecos de la letra, en el blanco de la página, un estado particular que corresponde a un tiempo específico, en este caso, que siempre es pasado. Un estado mental finalmente. Y cuyo valor, al igual que los libros, se aloja en preservar la memoria. Anotar y publicar para no olvidar o ser olvidado.
El espacio de una libreta es de una intimidad y apertura tal, que no podemos dejar de mencionar aquella cita realizada por Bachelard en su ‘poética del espacio’, donde relata aquel momento en que Rilke y dos compañeros advierten en la noche profunda “la ventana iluminada de una cabaña distante, la última cabaña, la que está sola en el horizonte ante los campos y los estanques” y añade pronto “aunque estábamos muy cerca unos de otros, seguíamos siendo tres aislados que ven la noche por primera vez”
Ese detalle que abre un universo, el de descubrir la noche por la soledad de la luz, es la que conmueve profundamente al poeta y lo aísla de sus compañeros. Así como esa luz única es la que conmueve a alguien, las libretas en su intimidad nos arrojan un conocimiento distinto sobre nuestras percepciones del mundo cada vez que las volvemos a mirar, puesto que todas aquellas anotaciones se encuentran en un estado virgen, aún con sus tachaduras, correcciones, etc. Cada espacio intervenido en una libreta nos habla de una decisión influida por un elemento externo que impacta lo interno. Cada vez que regresamos a la virginidad de nuestras anotaciones, descubrimos nuevos significados o valoraciones a partir de los cambios que hemos tenido.
El valor de anotar nos pareció en extremo significativo, y por sobre todo, la valoración que Christian hace de su propio acto. Así mismo nos pareció importante la abundancia de estilos de escritura, en cuanto forma. Letra imprentas enormes que con dos palabras la página se encontraba colmada, y otras letras más pequeñas o un poco más veloces. Textos arrinconados, páginas en blanco. Colores de tinta, dibujos. Todas esos elementos visuales que aparecen de golpe a primera vista casi anunciándose como textos de lectura rápida – que , por cierto, no lo son – hacen señas del tiempo de escritura. Cuanto tiempo demoro en fijar una idea, en traducirla en escritura en el espacio, en hacer permanente aunque no siempre evidente la corporalidad del momento en que se escribe.
La obra de Christian y la concepción que tenía el mismo de la publicación nos calzó perfecto en nuestra línea de trabajo. Nosotros, como Naranja, trabajamos con ediciones experimentales que, en resumidísimas cuentas, no es más que hacer evidente que todos los elementos de un libro, materiales e inmateriales, nos relatan algo, y bajo ese entendimiento es que intentamos pensar como leeremos cada uno de los elementos. Que información me entrega cada uno de ellos.
Es por eso que, repito, los textos en word clamaban por acercarse más a un formato de libreta. Pero ‘A la vuelta de la rueda’ no es una reproducción exacta de aquella libreta o un resumen de todas la libretas existentes. Tampoco podríamos decir que es un libro tradicional. Es una re-interpretación de los tiempos y formas de escritura, además de la re-interpretar los elementos de una libreta. Una línea de tiempo de un periodo de la vida de Christian y que aparecen a ratos en el libro, en su forma original, como podrán ver en las páginas digitalizadas. ‘A la vuelta de la rueda’ la entendemos como una secuencia de momentos, tanto en el proceso como en la lectura, que a fin de cuentas es la esencia de lo que es un libro, entendido desde el uso.
Además, de una manera inesperada, Christian nos pidió dos encargos relacionados con componentes lúdicos-poéticos para el libro. Uno en que mediante una rueda, se seleccionan relaciones entre poemas e imágenes; y otro llamado ‘Pepito paga doble’ en el que a través de bandas transparentes se pueden configurar cientos de poemas distintos. Este componente lúdico propositivo para el lector, constituyen hitos en el tiempo de lectura que nos habla de que la obra, al estar publicada, al hacerse pública, visible, deja en evidencia que solo existe activamente en el momento en que el lector la aborda, la traduce y la experimenta físicamente. Y sus existencias son y serán tan múltiples que en sí misma constituyen un universo.
Agradecemos profundamente la confianza de Christian, su claridad, su entrega, todas las conversaciones y reunion que permitieron materializer este proyecto. Para nosotros ‘A la vuelta de la rueda’ ha sido un tremendo desafío del que hemos aprendido mucho y al que le deseamos el mejor de los éxitos. Esperamos que esta obra llegue a todos los lectores que sean merecedores de leerla y usarla, teniendo tantas existencias como sea posible.